Me gusta escribir en el blog, pero me gustaría más que algún editor me diese un poco de espacio en un periódico. Y que me pagase por ello.

viernes, 3 de julio de 2015

¿Qué ha pasado con Ricard?

Parece que a nadie le suena extraño que un periodista haya tenido que salir de Egipto bajo la amenaza de ser detenido. Ha sucedido antes. Además, Egipto no es el paradigma de país democrático con inquebrantable libertad de prensa y resulta que, justo ahora, se encuentra con el mayor número de periodistas entre rejas de su historia. Por eso, digo, a nadie le extrañó demasiado que nuestro compañero Ricard González haya huido del país poniendo pies en polvorosa, como él mismo explicó aquí.

Pero el asunto, en este caso, sí que es extraño. La primera pregunta que se me viene a la cabeza es, ¿Por qué Ricard? En Egipto hay 1.400 periodistas extranjeros acreditados y la mayoría somos hipercríticos con el régimen, que además suele echarnos la culpa de todos sus males.  Es cierto que ponen muchas trabas y trabajar en la calle no es sencillo, pero no es común que te vayan amenazando con arrestarte.

Bien, yo no quiero hacer de abogado del diablo, pero hay dos cosas que me mosquean. Y me mosquean porque, al ser yo mismo periodista en Egipto, es lógico que me preocupe el hecho de que un compañero se haya visto amenazado por las autoridades.

La primera es la respuesta que me dio Bader Abdelaty, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores egipcio. Me dijo lo siguiente:

"No tenemos ni idea de lo que ha pasado. González sigue acreditado en el Servicio de Información del Estado. No tenemos nada que ver con lo que él dice. Se fue del país por decisión propia, sin contactar con ningún oficial sobre este problema. Tampoco hemos recibido ninguna queja por parte de la Embajada de España. Todo esto es sospechoso y no es lógico. David Kirkpatrick escribe artículos negativos sobre Egipto en el New York Times a diario y no le decimos nada. Estamos muy cabreados. Hemos contactado con el Ministerio del Interior y dicen no tener idea sobre este asunto. Tenemos 1.400 periodistas extranjeros y no nos importa un artículo escrito aquí o allí. Si vemos información errónea, simplemente enviamos nuestro punto de vista".

Hay que cogerlo con pinzas, pero si ellos aseguran no tener nada contra Ricard, ¿qué pasaría si este volviese al país? Si en realidad hubiesen cargos contra él, la respuesta habría sido mucho mas ambigua.

La segunda molestia viene de la respuesta de la Embajada en El Cairo: "no hay comentarios". Aquí nadie ha salido, desde el Ministerio de Exteriores, a quejarse por lo sucedido. Ni siquiera su diario ha salido en defensa del periodista. Sospecho que el propio protagonista está tan confundido como yo, así que nos gustaría que este tema se aclarase.

Si eres periodista y lees esto, ¿podrías hacer un par de preguntas por Madrid?


martes, 28 de abril de 2015

Libia y la inmigración

Cuando murió Gadafi, la OTAN se desentendió de Libia. El país fue 'liberado' del opresor, pero quedaron decenas y decenas de milicias armadas, de hombres que sentían que las armas, efectivamente, les otorgaban un poder. Y el país se dirigió al caos.

Libia fue siempre un país de acogida para inmigrantes subsaharianos. La extraordinaria riqueza en recursos del país y la poca población (entre seis y siete millones) requerían mano de obra extranjera.

Durante la guerra, muchos inmigrantes fueron forzados por Gadafi a combatir en sus filas, cosa que les marcaría una vez acabado el conflicto. Un periodista español me contó que Gadafi les pagaba con billetes falsos, que él mismo vio cuando fue a documentar una masacre donde los rebeldes habían matado a un grupo de inmigrantes.

Para los vencedores, los inmigrantes eran simples mercenarios. Eran el enemigo. Así, las milicias dispusieron de ellos a sus anchas tras la victoria sobre el dictador. Encerrados en campos de detención sin las mínimas condiciones humanitarias, forzados a trabajar como esclavos, maltratados físicamente, retenidos en espera del pago de un rescate, que reclamaban a las familias.

Y ahora nos escandalizamos porque la gente quiere huir de esa pesadilla a través del mar hacia Europa. Una Europa que, recordemos, participó directamente en el bombardeo libio. Una Europa que sigue desentendiéndose de Libia y solo se preocupa por mantener sus fronteras selladas. Una Europa que culpa a los traficantes, obviando que estos no existirían si no hubiese gente que quiere jugarse el pellejo en una barcaza, que quiere huir del horror.

Estemos atentos, pues. Las desigualdades crecen exponencialmente en los países africanos, los conflictos se intensifican en el cuerno de África y Oriente Medio. Esto solo puede ir a mas.


Alberto Pradilla añade: A todo ello le añadiría que ya durante la época de Gadafi los subsaharianos eran tratados como esclavos. De hecho existían cárceles para migrantes "ilegales" y Libia era un socio prioritario de Europa para el "control migratorio" que viene a ser un país al que Bruselas le paga para que ejerca de perro guardián expeditivo...

P.D.: Este texto está firmado por un inmigrante.

martes, 17 de marzo de 2015

La culpa es de los ultras

La policía y la fiscalía culpan a los ultras del Zamalek... y a los Hermanos Musulmanes. Los ultras, a su vez, culpan a la policía, pero no es un empate. Aquí unos pierden y otros ganan. Hablamos de la tragedia acaecida en el Estadio de las Fuerzas Aéreas de El Cairo el pasado 8 de febrero, de un escenario de masificación de gentes y gases lacrimógenos en el que 20 personas perdieron la vida.

La fiscalía ha imputado por ello a 16 ultras y ha culpado al que siempre tiene la culpa de todos los males, es decir, los Hermanos Musulmanes. "La investigación de la fiscalía ha probado que el grupo terrorista de los Hermanos Musulmanes, en su afán por destrozar los pilares de la estabilidad del país, ha utilizado su relación con los cachorros del grupo de aficionados del Zamalek, los Caballeros Blancos", dice un comunicado. Van mas allá. Afirman que lo hicieron para sabotear la conferencia económica que se acaba de celebrar en Sharm el Sheikh. Vamos, que los ultras planearon su propia muerte.

Precisamente hoy he publicado un texto en El Confidencial que recoge el testimonio de dos de los ultras, uno de los cuales fue detenido durante los hechos. Me dijo que en comisaría le pegaban "cada  tres o cuatro horas" para forzarle a confesar su relación con los HM. Podéis leer su versión aquí. 








martes, 10 de marzo de 2015

Los beduinos vuelven a sus orígenes

He publicado en el Middle East Eye, esta vez en inglés, la historia de la tribu beduina que habita en las montañas del sur de la Península del Sinaí. Ante la caída del turismo, que solía visitar en masa el monasterio de Santa Catalina y el Monte Sinaí, los habitantes de la zona están redescubriendo una antigua fuente de vida: los huertos de altura. You can read the story here.



miércoles, 25 de febrero de 2015

Un día cualquiera en Egipto

Hace dos días supimos que 25 jóvenes recibieron penas de entre 3 y 5 años por manifestarse pacíficamente. Uno de ellos fue condenado por ayudar a dos chicas. Y otro, Alaa, fue condenado por ser Alaa. La situación es paradójica, ya que al día siguiente el Ministro del Interior y el Primer Ministro de Mubarak fueron absueltos por corrupción, por asignar a dedo a una empresa alemana un contrato de más de un millón de euros. Hay mucha gente que piensa mal de la justicia egipcia por estas casualidades...

Y es que este país se empeña en dar titulares y hoy ha sido, también, un día prolífico. Si sumamos todas las piezas, podemos ver el rumbo...

Para empezar, Ahmed Ezz, quien amañó las elecciones de Mubarak, fue excluido de la carrera para las próximas elecciones parlamentarias. Está bien y es un alivio para muchos, que hubiesen considerado demasiado exagerado que pudiese haber concurrido. El titular, por eso, es que el personaje se ha quejado porque su exclusión traiciona los valores de la revolución y la democracia. Quien sí que ha sido aceptada en la carrera es Sama al Masri, una bailadora del vientre que reconoce que no tiene programa electoral "porque pensaba que no la iban a aceptar".

Pero no todo son noticias absurdas, también hay muy serias. Hoy hemos sabido que un niño de 9 años se enfrentará a un tribunal militar por atacar a las fuerzas de seguridad y quemar infraestructuras eléctricas. Y también hemos sabido que dos personas han muerto torturadas en una comisaría de policía de El Cairo. Recuerda a otros tiempos de impunidad.

El día no ha acabado...

P.D: Por cierto, tenemos nueva ley antiterrorista.

sábado, 21 de febrero de 2015

Cristianos coptos decapitados

Nos pasamos por el pueblo de Al Aur, en la provincia egipcia de Minia. El Estado Islámico degolló a 14 de sus habitantes. Video y texto en El Confidencial, en este link.





miércoles, 11 de febrero de 2015

Justicia selectiva

En un solo juicio, en ausencia, 230 personas son condenadas a cadena perpetua. Además, 39 menores reciben diez años. Texto publicado en La Vanguardia el 8 de febrero del 2015. Aquí se puede leer el artículo.